¿Ha notado un cambio de actitud en su pareja?, ¿Nota que cuida más su aspecto personal?, ¿Ha detectado un cambio en su rutina diaria, llegando a casa más tarde de lo habitual o realizando nuevas actividades lúdicas?, ¿Le impide el acceso a ciertos dispositivos, cuando antes no le importaba?, ¿Está más pendiente de su teléfono, cuando antes no le prestaba la misma atención?, ¿Hace referencias constantes sobre terceras personas?
Si ha contestado Sí a algunas de las preguntas anteriores, todas ellas son indicadores de una posible infidelidad. La infidelidad es un abuso o mal uso de la confianza por parte de uno de los miembros de la pareja en una relación, que puede llegar a crear un gran conflicto emocional.